FAO pide mayor inversión en sector agrícola de países en desarrollo

FAO pide mayor inversión en sector agrícola de países en desarrollo

El director general de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Jacques Diouf, solicitará hoy el aumento de las inversiones en la agricultura y en las zonas rurales de los países en desarrollo, donde viven la mayor parte de los pobres del mundo, para mejorar las oportunidades económicas y reducir el hambre.

Durante su participación en la reunión de la ONU en la que los líderes mundiales discutirán sobre las medidas contra el hambre y la pobreza, Diouf explicará que según estudios de la FAO, los países que han combatido mejor la desnutrición son los que han realizado inversiones grandes y han apoyado la productividad en la agricultura

“A pesar de que cada vez hay más datos que demuestran que los pobres y hambrientos dependen de la agricultura para su sustento, muchos países en desarrollo siguen invirtiendo muy poco en la agricultura y el desarrollo rural. En las naciones donde la desnutrición está más difundida, las cuotas de inversiones estatales dedicadas a la agricultura están muy lejos de responder a la importancia económica de ese sector”, señalará el titular de la FAO.

La malnutrición y el hambre son a la vez causa y efecto de la pobreza. El 70% de la población más pobre del mundo vive en zonas rurales. Por ello, Diouf pedirá que se implementen medidas directas para reforzar el acceso efectivo a los alimentos, especialmente mediante los ingresos generados por el empleo en actividades agrarias seguras, productivas y por lo tanto competitivas.

En su discurso, el funcionario recordará que muchos de los países más pobres necesitan desesperadamente inversiones agrícolas y que una ayuda internacional que comprendiera también una solución duradera del problema de la deuda, sería una señal tangible de que el mundo está decidido a cumplir los objetivos de la Cumbre Mundial sobre la Alimentación y de Desarrollo de la ONU para el Milenio.

Los líderes de 186 países acordaron en la Cumbre Mundial sobre la Alimentación de 1996 reducir a la mitad para el año 2015 el número de personas que sufren hambre –y que entonces eran 841 millones-. El primero de los ocho objetivos de desarrollo de la ONU para el Milenio es idéntico, pero además solicita que se reduzca a la mitad para esa misma fecha, el número de personas cuyos ingresos eran inferiores a un dólar por día en los años 90.

Diouf instará a los líderes de todo el mundo a que refuercen la voluntad política para luchar contra el hambre sobre bases sostenibles y a que se comprometan firmemente a reformar las políticas agrarias y de desarrollo rural para sentar los cimientos fundamentales necesarios para mitigar el hambre y la pobreza en el mundo.