Enviado de la ONU pide ayuda para refugiados en Sudán

El enviado de la ONU para Sudán, Tom Eric Vraalsen, pidió hoy a la comunidad internacional reunir 4.3 millones de dólares en los próximos tres meses para aliviar el sufrimiento de la población de refugiados de Darfur, región occidental de ese país, donde se vive una crisis humanitaria.

Después de visitar Chad, país que acoge a decenas de miles de refugiados sudaneses, el funcionario urgió a los donantes a responder generosa y rápidamente a su llamamiento. “Sin una respuesta rápida, las condiciones de estos refugiados se deteriorará aún más”, puntualizó.

Se calcula que el mes pasado unos 30.000 refugiados salieron de la provincia de Darfur, donde muchos civiles han sido asesinados o vejados, además de que sus viviendas han sido quemadas y sus pertenencias robadas por las milicias armadas de la zona.

Como consecuencia de este éxodo, el número de refugiados que han huido de Darfur a Chad a partir de la intensificación del conflicto en febrero de 2003 se elevó a cerca de 90.000. Estos refugiados se han establecido a lo largo de una franja de 600Km en la frontera de Sudán y Chad, una zona muy insegura.

Hasta hace poco, estas personas habían dependido exclusivamente de la generosidad de las poblaciones locales y de la escasa asistencia del gobierno de Chad. Pero el sistema de la ONU respondió a través del Programa Mundial de Alimentos (PMA) y de la Alta Comisaría de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que brindan ayuda alimentaria a los refugiados.

Además, el ACNUR ha comenzado un programa para reubicar a los 90.000 refugiados en áreas alejadas al menos 50Km de la frontera.

Por su parte, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) busca apoyo para ofrecer a esta población servicios educativos y la Organización Mundial de la Salud (OMS) hace lo propio para llevar a los refugiados cuidados médicos básicos, incluyendo la vacunación.