Las políticas migratorias estadounidenses presionan el sistema de asilo en México

El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, conversa con los habitantes de un albergue para refugiados en Tapachula, México.
© ACNUR/Gabo Morales
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, conversa con los habitantes de un albergue para refugiados en Tapachula, México.

Las políticas migratorias estadounidenses presionan el sistema de asilo en México

Migrantes y refugiados

La violencia y la pobreza que aqueja al Triángulo Norte de Centroamérica sumadas al endurecimiento de las políticas migratorias estadounidenses han causado en el último año un aumento de más de 230% de las solicitudes de asilo en México. El titular de ACNUR concluyó una visita a ese país, donde agradeció el apoyo del Gobierno a los migrantes y se pronunció por aumentar los recursos para atenderlas.

El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados destacó el apoyo que el Gobierno de México da a los migrantes centroamericanos que han llegado a su territorio en el último año huyendo de la violencia, la pobreza y otros flagelos que afectan a sus países.

Filippo Grandi terminó el lunes una visita de cuatro días a México en la que conversó con refugiados y solicitantes de asilo centroamericanos alojados en albergues de las ciudades de Tapachula, Saltillo y México.

En los primeros ocho meses de 2019, México había recibido 48.000 peticiones de asilo, lo que representa un aumento de 231% con respecto a las solicitudes de 2018 y plantea un nuevo reto a un país en el que apenas en 2014 sólo 2.137 extranjeros pedían protección formalmente. Los solicitantes provienen de El Salvador, Honduras y Guatemala.

“México se enfrenta a crecientes desafíos y preocupaciones a raíz de los cambios de políticas en los Estados Unidos, que llevaron a un aumento significativo en el número de personas que deciden solicitar asilo en México, ejerciendo presión adicional sobre un sistema de asilo que ya está sobrecargado. Las preocupaciones en este sentido son particularmente agudas a lo largo de la frontera norte de México”, dijo el Alto Comisionado.

Tras sus charlas con los refugiados y solicitantes de asilo, Grandi mencionó las amenazas, la extorsión y la persecución política entre las principales razones que hicieron que esas personas decidieran dejar atrás su vida y su país en busca de seguridad.

Agradecimiento

“Agradezco a México por brindar la protección urgente que necesitan estas personas”, dijo el Alto Comisionado en Tapachula, Chiapas, el principal punto de entrada de los migrantes por situarse muy cerca de la frontera con Guatemala.

"México tiene una larga y orgullosa tradición de acoger a las personas que huyen de la persecución", recordó.

Grandi afirmó que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) lleva a cabo una labor elogiable, pero llamó aumentar el presupuesto que se dedica en consonancia con el incremento de solicitudes de asilo.

“Si la COMAR tuviera más recursos, podría hacer su trabajo de manera más eficiente y reducir el tiempo que los solicitantes de asilo deben esperar para que se decida sobre su condición”, apuntó luego de asistir en Tapachula a la inauguración del nuevo centro de registro de la CONMAR en esa ciudad. El objetivo de ese centro es reducir los tiempos de espera para que quienes reciban el asilo puedan reiniciar sus vidas e integrarse completamente en la sociedad mexicana.

El alto funcionario también se refirió a la situación de personas procedentes de algunos países de África, así como de haitianos y cubanos, muchos de los cuales no desean solicitar la condición de refugiado en México. "Para las personas que no se encuentren en necesidad de protección internacional, se deben encontrar soluciones de acuerdo con el Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular."

Programa innovador

En Saltillo, Alto Comisionado recorrió las instalaciones de una fábrica de electrodomésticos de mucha tradición que emplea a decenas de refugiados y aplaudió la iniciativa notando que no había visto proyectos semejantes en muchos países.

“Este programa innovador es una situación en la que todos salen ganando. Ayuda a cubrir la escasez de mano de obra en algunas regiones, mientras les brinda a los refugiados y a sus familias acceso al empleo, la educación y la vivienda y, sobre todo, a la seguridad y la dignidad. Es un excelente modelo que podría ser replicado, no sólo en todo México, sino en otras partes del mundo”, señaló.

La última escala de la gira de Grandi por México fue la capital del país. Ahí se reunió con altos funcionarios del Gobierno Federal, así como con representantes de otras agencias de la ONU y de organizaciones de la sociedad civil.