América Latina debe proteger la maternidad con leyes

Los bebés que son amamantados tienen en promedio un coeficiente intelectual 2,6 puntos mayor que los bebés que no.
UNICEF / Giacomo Pirozzi
Los bebés que son amamantados tienen en promedio un coeficiente intelectual 2,6 puntos mayor que los bebés que no.

América Latina debe proteger la maternidad con leyes

Salud

Una licencia de maternidad justa y suficiente, tiempo para amamantar después de regresar al trabajo y el apoyo del sistema de salud son tres requisitos esenciales para garantizar la salud y el desarrollo de los bebés de la región.

La Organización Panamericana de la Salud ha pedido a los Estados de América Latina que garanticen por ley el tiempo y el apoyo suficiente a las madres para amamantar a sus hijos.

Eso incluye una licencia de maternidad suficiente y remunerada. También que, tras reincorporarse al trabajo, disfruten de las necesarias pausas para amamantar.

El llamado se hace durante la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que se celebra anualmente del 1 al 7 de agosto y que este año 2019 busca c concienciar sobre la necesidad de apoyar a los padres y madres y de garantizarles un entorno favorable para la lactancia materna..

Instrumentos que no se implementan

Actualmente sólo tres países de las Américas otorgan a las madres que trabajan una licencia de maternidad remunerada de al menos 18 semanas, y ocho de al menos 14 semanas.

El Convenio 183 de la Organización Internacional del Trabajo y la Recomendación sobre la protección de la maternidad del año 2000, establecen que las madres deben tener al menos 14 semanas, y los Gobiernos deben intentar extenderla al menos a 18. Estos instrumentos establecen además que, al reincorporarse al trabajo, las madres deben tener dos pausas de 30 minutos al día para amamantar, y que debe haber un espacio para hacerlo en el lugar de trabajo o cerca de este.

“La maternidad es un momento de especial vulnerabilidad para las mujeres que trabajan y sus familias. Es vital que las mujeres estén protegidas por la ley durante el embarazo y la lactancia para que dispongan del tiempo adecuado para dar a luz, recuperarse y amamantar a sus hijos”, señaló el doctor Anselm Hennis, director del Departamento de Enfermedades no Transmisibles y Salud Mental de la OPS.

La maternidad es un momento de especial vulnerabilidad para las mujeres que trabajan y sus familias.

Según el experto, la licencia de maternidad con goce de sueldo lleva a un período de lactancia más largo y a mejor estado de salud y bienestar tanto para la madre como para el niño. Las mujeres a las que solo se les da una licencia de maternidad corta (de seis semanas o menos) son cuatro veces más propensas a no amamantar o a dejar de amamantar más temprano.

“Muchos países de la región cuentan, en sus leyes laborales, con disposiciones sobre la maternidad y la lactancia materna para las madres que trabajan, pero pocas de estas disposiciones son lo suficientemente ambiciosas como para asegurar que las mujeres y los niños reciban el apoyo adecuado. Este tema tiene que ver fundamentalmente con la igualdad, ya que las mujeres que no están protegidas se enfrentan a un dilema muy difícil: la estabilidad económica o la salud de su hijo”, asegura Rubén Grajeda, asesor regional la OPS.

Beneficios de la lactancia

En la Región de las Américas, el 54% de los bebés son amamantados en la primera hora de vida y el 38% reciben lactancia materna exclusiva hasta los seis meses de edad como recomienda la Organización Mundial de la Salud.

Sin embargo, los datos varían significativamente de un país a otro: la lactancia materna de inicio temprano (en la primera hora de vida) va desde el 38,1% en la República Dominicana hasta el 76,5% en Uruguay. La lactancia materna exclusiva durante seis meses varía del 2,8% en Suriname y el 68,4% en Perú.

La lactancia materna tiene una gran variedad de beneficios tanto para la madre como para el niño. En los niños pequeños, cubre todas sus necesidades nutricionales e inmunológicas; protege contra las enfermedades y la muerte por diarrea e infecciones respiratorias; y reduce el riesgo de defectos en la mordida, así como de la obesidad y la diabetes.

La lactancia materna también contribuye al desarrollo cognitivo: los bebés que son amamantados tienen en promedio un coeficiente intelectual 2,6 puntos mayor que los bebés que no.

Asimismo, las mujeres que amamantan a sus bebés también tienen un menor riesgo de cáncer de mama y de ovarios, embarazos más espaciados y menor riesgo de diabetes y obesidad.

Se estima que la lactancia materna universal podría evitar 823.000 muertes anuales en niños menores de 5 años y 20.000 de mujeres por cáncer de mama.