La Convención de Estocolmo sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes (COPs), patrocinada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), entrará en vigor este lunes, marcando el inicio de un esfuerzo internacional por eliminar del mundo a los PCBs, dioxinas y furanos, así como nueve plaguicidas altamente peligrosos.