El COVID-19 no solo ataca la salud, también exacerba la xenofobia la exclusión y el odio, asegura un experto en derechos humanos, que alerta de los políticos que usan las minorías como chivos expiatorios y piden a los Estados que las protejan, garantizando sus derechos, incluidos el acceso a los servicios de salud y la información sobre la pandemia.