“Existen episodios en nuestra historia tan dolorosos y tan contrarios a la naturaleza humana que es casi imposible hablar de ellos sin sentir absoluta vergüenza y consternación.”

Así se expresó María Fernanda Espinosa, presidenta de la Asamblea General de la ONU, en un evento celebrado este viernes en la sede de la Organización para conmemorar el 70 aniversario de la convención contra el genocidio.

A la luz de los horrores cometidos durante la Segunda Guerra Mundial, el 9 de diciembre de 1948 los países miembros de la ONU firmaron ese documento para prevenir y castigar el genocidio, mismo que entró en vigor a principios de 1951.

En ese entonces, la esperanza fue decir nunca más a esas atrocidades.