El Programa de la ONU para el Desarrollo colabora con la empresa Sun Exchange para que una de las grandes universidades de Moldavia utilice el sol como fuente de energía.

La compañía ofrece a los usuarios la posibilidad de comprar paneles y alquilarlos a hospitales, escuelas y otras entidades utilizando su divisa nacional o SolarCoins, una moneda digital.

Primero, se vende todos los paneles necesarios para el proyecto.

Cuando los arrendatarios comienza a utilizarlos, pagan por cada unidad de electricidad generada y, al cabo de veinte años, ellos se convierten en los dueños de los paneles y los antiguos propietarios reciben SolarCoins por la cantidad de energía producida durante ese tiempo.

En Moldavia, se importa el 74 % de la energía, por lo que los precios han aumentado más de un 50 % en los últimos cinco años. Con 15.000 quilómetros cuadrados de paneles, se espera que la iniciativa satisfaga sus necesidades energéticas por medio de la energía solar y que ahorre de manera considerable.